sábado, 9 de agosto de 2014

Ajoblanco


Introducción

         Hola amig@s
      El calor aprieta y las sopas frías son una excelente elección en éste tiempo. Éste es el segundo verano de vida de mi blog y aún me quedan muchas recetas clásicas que presentar. Me parece oportuno presentar primero la versión clásica de una receta para,a posteriori, darle una vuelta al plato, versionándolo y ofreciendo nuevas posibilidades. Ya habrá tiempo.
      Hablar de ajoblanco es hablar de Andalucía pues es ahí en donde nace ésta sopa fría y está muy presente en la mitad oriental de ella siendo Málaga el lugar en dónde al parecer,nace el plato. Extremadura también tiene presente éste plato entre sus platos típicos.
      Se trata de una variedad de gazpacho,por decirlo de algún modo.Aunque, dado que el tomate (principal ingrediente del gazpacho) vino de América y el ajoblanco es muy anterior habría que decir mejor que el gazpacho es una evolución de éste tipo de sopas frías que,como el ajoblanco nos acompaña al parecer desde la época de los romanos.
      Básicamente es una emulsión fría de almendras crudas, pan, vinagre y aceite. Los puristas dirán que sólo el que se hace en mortero a base de "hacer músculo" dándole al mortero durante mucho tiempo es el auténtico. Nosotros nos vamos a saltar esa norma y lo haremos en pocos minutos ayudándonos de un robot de cocina o una batidora.
      Se sirve frío y, normalmente, acompañado de uvas o melón. En Granada suele ser el acompañamiento de una papa asada.
      Por último, deciros que aunque sea un plato refrescante y de fácil digestión, las almendras y el pan hacen que no sea, ni mucho menos, un plato con pocas calorías.





Ingredientes (4 personas)

- 200 gr de almendras crudas
- 200 gr de miga de pan
- 1 diente de ajo
- Aceite de oliva (2 cucharadas)
- Vinagre ( 1 cucharada)
- Sal







Preparación

      Escaldamos las almendras metiéndolas quince segundos en agua hirviendo.Las sacamos a un colador y dejamos que enfríen un par de minutos antes de pelarlas. Si las encontramos sin piel,mejor,nos ahorramos éste paso. En mi caso no fue así y tuve que pelarlas.




      Mojamos la miga de pan con agua muy fría hasta que empape bien.





      Ponemos en un vaso de la batidora las almendras con uno o dos dientes e ajo al gusto y una cucharada de agua fría y batimos bien hasta que estén totalmente molidas y se forme una pasta mas o menos uniforme
      Añadir la miga de pan remojada en agua. De la cantidad de miga de pan y agua que pongamos dependerá lo espeso que nos quede el ajoblanco. A mi me gusta más bien espeso,pero eso va en gustos.


                                                      (Hacer click en la foto para agrandarla)


      Cuando tengamos una pasta hecha añadimos el aceite,un pellizco de sal y el vinagre y seguimos batiendo para que nos ligue el conjunto.


                                                      (Hacer click en la foto para agrandarla)


      Añadimos agua muy fría y seguimos batiendo.





      Cuando esté todo,si lo queremos mas fino lo podemos colar por un chino y lo servimos. Si no lo vamos a consumir en ese momento, lo metemos en la nevera hasta el momento de servir para que esté frío.
      Yo lo acompañé hoy de unas bolitas de melón hechas con un sacabocados. Bon appétit.






Vídeo






Calorías por ración:  484 Kcal